La cebolla es escarcha
cerrada y pobre.
Escarcha de tus días
y de mis noches.
Hambre y cebolla,
hielo negro y escarcha
grande y redonda.
En la cuna del hambre
mi niño estaba.
Con sangre de cebolla
se amamantaba.
Pero tu sangre,
escarchada de azúcar
cebolla y hambre.
Una mujer morena
resuelta en luna
se derrama hilo a hilo
sobre la cuna.
Ríete niño,
que te traigo la luna
cuando es preciso.
(Alondra de mi casa
ríete mucho,
que es la risa en tus ojos
la luz del mundo.
Ríete tanto,
que mi alma al oírte
bata el espacio.)
Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Boca que vuela,
corazón que en tus ojos
relampaguea.
Es tu risa la espada
más victoriosa,
vencedor de las flores
y las alondras.
Rival del sol.
Porvenir de mis huesos
y de mi amor.
Desperté de ser niño:
nunca despiertes.
Triste llevo la boca:
ríete siempre.
Siempre en la cuna
defendiendo la risa
pluma por pluma.
(Ser de vuelo tan alto,
tan extendido,
que tu carne es el cielo
recién nacido.
Si yo pudiera
remontarme al origen
de tu carrera.)
Al octavo mes ríes
con cinco azahares.
Con cinco diminutas
ferocidades.
Con cinco dientes
como cinco jazmines
adolescentes.
Frontera de los besos
serán mañana,
cuando en la dentadura
sientas un arma.
Sientas un fuego
correr dientes abajo
buscando el centro.
Vuela niño en la doble
luna del pecho:
él, triste de cebolla,
tú, satisfecho.
No te derrumbes.
No sepas lo que pasa
ni lo que ocurre.
Este poema titulado "Nanas de la cebolla" uno de los más tristes de la generación del 36, fue escrito es una cárcel por Miguel Hernández en 1939 en plena Guerra Civil. Miguel Hernández es uno de los poetas de la literatura española del siglo XX más conocido.
ResponderEliminarEste poema va sobre la historia de un padre que fue arrestado antes de cruzar la frontera para huir de la guerra civil. El padre al estar en la cárcel recibió una carta de su mujer, en la cual decía lo mal que lo estaban pasando, que no tenían para comer ni para nada, que se alimentaban a base de cebolla y pan. El padre como respuesta le escribe y le dice como se sienta la rabia, la nostalgia y la incapacidad que siente por no poder ayudarles a su mujer y a su hijo.
En conclusión este poema escrito por Miguel Hernández es un poema que nos muestra la nostalgia que se puede sentir cuando tu mujer y hijo pasan hambre que lo único que tienen para comer es pan y cebolla y la impotencia de no poder hacer nada.